Compañeras y compañeros,
Actualmente se ha denunciado por parte de un grupo de estudiantes (a través de redes sociales) la
responsabilidad de la Comisión contra el Subcontrato por la desvinculación de las compañerastrabajadoras
del aseo de la empresa “Aseo Vital”. Como comisión abierta que lleva trabajando
arduamente por mejorar las condiciones laborales de las trabajadoras subcontratadas de la
facultad -y que abarca a estudiantes de diferentes posiciones políticas- nos vemos en la obligación
de aclarar:
1. Como estudiantes no tenemos facultad alguna para despedir o contratar a trabajadoras,
dicha facultad recae en Decanato, el cual asumió en su programa la promesa de terminar
con el subcontrato en la facultad. Esta decisión es reflejo de una ardua y larga lucha del
estudiantado en su conjunto, entendiendo que el subcontrato es una de las formas de
contratación más precarizadas en la actualidad y que no se condice con lo que esperamos y
entendemos como trabajo digno. La demanda del estudiantado -plasmada en el protocolo
presentado a Decanato antes de iniciarse la toma de la facultad- exigía la internalización de
todas las trabajadoras del aseo que actualmente desempeñaban funciones a través de la
empresa “Aseo Vital”. Decanato al decidir el fin al subcontrato genera que “Aseo Vital”
desvincule a sus trabajadoras, no haciéndose cargo de su futuro laboral en el marco de las
demandas del estudiantado. Cabe recalcar que hasta la semana pasada decanato no se
había preocupado de esclarecer la relación contractual con la empresa, por tanto, la opción
que ellos nos habían planteado era terminar con el subcontrato en todas los edificios,
exceptuando el de Pío Nono, por lo que habría una posibilidad de que las trabajadoras que
no cumplían con los requisitos de escolaridad o ciudadanía pudiesen seguir trabajando
bajo esta modalidad hasta que se rindiesen los exámenes libres e hiciesen los trámites de
migración, sin embargo, al tardíamente darse cuenta de que no podía parcializarse el
término contractual con la empresa Aseo Vital, se cierra esta posibilidad. Esto nos deja
entrever que finalmente la intención de decanato, si bien era acabar con el subcontrato, no
se hacía cargo de manera efectiva de las trabajadoras que estaban detrás de este régimen
laboral, ni de la planificación de cómo debía llevarse a cabo la internalización.
2. Dentro de este proceso nos encontramos con varias dificultades, una de ellas fue el no
tener un registro de todas las trabajadoras debido a que, en la clausula séptima de su
contrato laboral, se establece la prohibición de “conversar con funcionarios y alumnos en
su horario de trabajo” lo que imposibilito contar con la información suficiente para
determinar quiénes cumplían los requisitos para entrar a la administración pública bajo la
modalidad de la contrata. La recopilación de esta fue realizada por parte de los miembros
de la comisión e implicó la dificultad de tener que hablar individualmente con cada una de
ellas. Por tanto no sólo significó tiempo, sino también mucho trabajo lograr la
comunicación y el vínculo que hoy tenemos con ellas. Asumimos la crítica con respecto a
este punto, sin embargo debemos entender que las condiciones en las cuales estábamos
trabajando en la elaboración del registro final no eran las óptimas debido, en parte, a que
las autoridades pudiendo habernos facilitado la información, haciéndose parte activa del
proceso, no lo hicieron.
3. Repudiamos profundamente la acción de un grupo de estudiantes de la facultad -quienes
no se han hecho parte en ningún momento de este proceso- que decidieron
instrumentalizar no sólo este largo y complejo período, sino también a las propias
trabajadoras, con el aparente objetivo de bajar la movilización que se ha desarrollado en
nuestra facultad desde hace más de un mes. Lo anterior se materializa en el grave hecho
suscitado el día de ayer (jueves 25 de junio) donde se grabó a una de las trabajadoras en el
edificio de Santa María, la cual al consultarle nos manifestó que se le hizo creer que eran
abogados y que se encontraban trabajando junto a los estudiantes que con ellas se han
movilizado, sin que esta supiera que dicho video seria difundido de manera masiva a través
de las redes sociales con el fin de atribuir a los estudiantes la culpa por la incertidumbre
laboral que ha implicado todo este proceso. Esta información es falsa -como ya lo hemos
planteado- y busca ocupar políticamente esta coyuntura como medio para atacar la
movilización estudiantil.
4. Queremos, para finalizar, hacer un llamado a que todos los compañeros y compañeras se
hagan presentes en este camino que aún no termina. Nuestro objetivo y compromiso,
como comisión y estudiantado, sigue siendo el de acompañar a todas las trabajadoras en el
proceso que implica la finalización del subcontrato y el paso de estas a la calidad de
funcionarias de la facultad.
Atte.
Comisión contra Subcontrato.
26 de Junio de 2015
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